La malévola estrategia de Daniel Ortega con los presos políticos

Desde que estalló la crisis política en Nicaragua, el régimen de Daniel Ortega ha utilizado un fenómeno llamado Puerta Giratoria para encarcelar a sus detractores y posteriormente desterrarlos.

El Grupo de Expertos en Derechos Humanos de Naciones Unidas advirtió en marzo de 2023, que desde el año 2019 se identificó el fenómeno de la Puerta Giratoria en Nicaragua, con el cual se detenía y se excarcelaba a un número similar de personas.

La Puerta Giratoria funciona como una especie de ciclo, el cual empieza con la detención de varias personas opositoras o consideradas como tal por el régimen de Ortega.

El segundo paso es mantenerlas encarceladas durante un tiempo, que puede ser durante meses o años. En algunos casos, las personas detenidas son acusadas y hasta condenadas por delitos usados por el régimen contra presos políticos. Algunos de estos delitos son menoscabo a la integridad nacional, traición a la patria, lavado de dinero, ciberdelitos, entre otros.

Pero también ha habido casos de personas que son detenidas y que no se presenta acusación en su contra.

El ciclo continúa hasta que el régimen tiene las cárceles llenas de presos políticos y decide excarcelarlos. Desde 2023, se han excarcelado a 357 personas, las cuales han sido desterradas y despojadas de su nacionalidad.

La Puerta Giratoria vuelve a iniciar después de la excarcelación, cuando el régimen nuevamente empieza a detener a opositores y a llenar las cárceles con presos políticos.

La última excarcelación que hizo el régimen de Ortega fue el cinco de septiembre de 2024, cuando desterró a 135 presos políticos hacia Guatemala.

Algunas organizaciones han mencionado que en las cárceles permanecen otros 36 presos políticos y presumen que el número puede aumentar debido al endurecimiento de algunas leyes represivas que son utilizadas para perseguir a opositores.